¿Qué es el paludismo?
El paludismo o malaria es una enfermedad viral causada por la picadura de un vector del zancudo del género Anopheles. Es una especie común en zonas selváticas y desiertas. Se encuentra presente en países del tercer mundo, aunque pueden aparecer brotes de esta enfermedad en cualquier parte del globo.
Mediante la aplicación de políticas públicas efectivas como la inmunización a través de la vacunación, la fumigación y conservación en buen estado de fuentes de agua aptas para el consumo humano se puede evitar la propagación de esta enfermedas que, según datos de la organización de la salud, al año cobra la vida de 781 mil personas.
Causas y síntomas del paludismo
La infección se produce por la picadura de la hembra del género Anopheles, quien es portadora del parásito plasmodium en sus variantes Plasmodium falciparum, Plasmodium vivax, Plasmodium malariae, Plasmodium ovale o Plasmodium knowlesi. Es importante señalar que cada variante tiene su sintomatología y todas son potencialmente mortales. Se basan en debilitar el sistema inmunológico. El parásito coloniza los elementos presentes en la sangre y compromete el funcionamiento de los órganos.
Los síntomas se manifiestan de manera diversa, la fiebre es el inicio, acompañándose de sudoración, dolor de cabeza y escalofríos. Puede padecerse náuseas, vómitos, heces con sangre, tos, ictericia, dolencias musculares, anomalías en la coagulación sanguínea, insuficiencia hepática, shock, perturbaciones en el sistema nervioso central y hasta caer en estado de coma.
Tratamientos para el paludismo
P. falciparum es la variante que produce la malaria más aguda y grave. Produce secuestro de glóbulos blancos en la sangre y evita el paso por el bazo y, por tanto, su destrucción. También se desarrolla la malaria cerebral, presentando alteraciones dentro del nivel de conciencia, convulsiones, hipoglucemia, acidosis metabólica, o hemorragias que se transforman en señales de una previsión que ameritan una rápida atención médica.
La enfermedad debe ser abordada inmediatamente después de diagnosticada y el tratamiento incluye el uso de antibióticos intravenosos, analgésicos y antiinflamatorios para mitigar de forma temprana la infección además de sueros hidratantes para evitar la anemia producida por la acción del parásito. Puede requerir hospitalización y aislamiento en todos los casos: tanto en niños y adultos y en casos de embarazadas o bebés contagiados.
Medidas de prevención
La prevención es la mejor arma contra esta enfermedad y desde su acción individual puede contribuir a resguardar su salud y la de su familia. Acudir a las jornadas de inmunización es vital para evitar contraer esta enfermedad. Al viajar, debe inmunizarse igualmente. Una dieta balanceada le proporciona los nutrientes que su cuerpo necesita y garantiza en buena parte el normal desenvolvimiento de su sistema inmunológico.
Cuidar el agua, fumigar espacios y mantener la limpieza en general son también medidas específicas para la prevención del paludismo. Practíquelas y cuide su salud.